jueves, 11 de junio de 2015

Quizá mañana.

Puede que sea mañana el día en que tenga que dar cuenta por todos los pecados cometidos.
Tendré que explicar por qué me pasé de soñadora y nunca luché lo suficiente por mis sueños; por qué he vivido tantas veces asustada y he cortado mis propias alas antes de echar a volar.
He superado la cuota mensual de amor no correspondido; y me toca pagar intereses por no odiar lo suficiente al mes. He tenido deudas que han dejado la cuenta de mi vida en números rojos.
Aposté por quien nunca valió un duro y dejé ir al caballo ganador. Decepcioné a quien siempre creyó en mí y le regalé disgustos, malos momentos y un sabor amargo para recordar.
Puede que mañana me den a elegir confesarlo todo, y pasar la eternidad lejos de aquí, bajo tierra o en el cielo. Y yo, indecisa, elegiré ahogarme con todo lo hecho y lo que quedó por hacer.



martes, 9 de junio de 2015

Almas gemelas.

Supongo que en el fondo dos almas gemelas son como dos gotas de agua:
Puede que estén hechas de lo mismo, pero no de la misma forma. Es posible que una venga de una tormenta, y otra tal vez, simplemente, recorra el mar. Puede que se conozcan y no se reconozcan, que se crucen y vuelvan a bifurcar su camino, porque al fin y al cabo, dos gotas de agua recorren distintos caminos, y quizá nunca lleguen al mismo destino.

Supongo que al final dos almas gemelas son de todo, menos gemelas.

lunes, 1 de junio de 2015

Quizá fue el mundo y su belleza natural;
pero tal vez -y sólo tal vez- fuiste tú, haciendo bonito todo aquello en lo que te fijabas,
porque jamás había visto algo tan maravilloso como la miraba que abanicaban tus pestañas.